
Hace tiempo que vengo pidiendo un deseo: ¡unas vacaciones!
Por fin me ha sido concedido. Al fin podré descansar, desconectar y, sobretodo, separarme del ordenador por unos días! :-)
Y, para combinar con el relax y demás placeres, qué mejor que un buen "kit vacacional". Yo ya me he hecho con el mío, que consiste en una caja de lápices de colores chulíiiiiiisima y un par de libros: uno, para ponerme al día de Flash; y el otro para deleitarme una vez más con la lectura de Las Cosmicómicas de Calvino.
Prometo volver con algunas sorpresillas... Hasta muy pronto, visitantes platónikos!
:-*